Remedios caseros para el mal aliento estomacal
Seguramente, alguna vez te has dado cuenta que alguien con el que estabas conversando tenía mal olor en la boca o, quizá, tú mismo en algunas ocasiones puedes haberlo experimentado. El mal aliento es un padecimiento muy frecuente entre las personas, se puede presentar tanto en niños como en adultos y depende en gran medida tanto de lo que comemos como de nuestros hábitos de higiene bucal.
En las próximas líneas de este artículo de Remedios-Naturales.org, vamos a darte los mejores remedios naturales que existen para combatir la halitosis que tiene su origen en alguna enfermedad o alteración digestiva. Sigue leyendo para descubrir los remedios caseros para el mal aliento estomacal y encuentra la solución a este problema tan molesto e incómodo.
Jengibre
El jengibre se utiliza para calmar el malestar estomacal, pero también para tratar el mal aliento. Esto se debe a los compuestos que activan una enzima en la saliva que se encarga de descomponer las bacterias encargadas de provocar los olores desagradables en la boca.
Puedes usar el jengibre como enjuague bucal. Para ello, necesitarás estos ingredientes:
- 1 cucharadita de jengibre.
- Jugo de 1 limón.
- 1 taza de agua tibia.
Preparación
Para obtener la infusión de jengibre, mezcla la cucharadita de jengibre con el jugo de limón en la taza de agua tibia y déjala reposar a temperatura ambiente. Enjuaga tu boca varias veces al día con esta infusión y verás cómo mantienes tu boca fresca y libre del mal aliento.
Perejil y vinagre de manzana
El perejil es un remedio casero muy popular utilizado para tratar el mal aliento. Gracias a su alto contenido en clorofila y su aroma fresco, tiene un efecto desodorante.
Cuando se mezcla con vinagre de manzana, se potencia su efecto, además de regular la acidez estomacal. Para realizar este remedio vas a necesitar:
- 2 ramas de perejil.
- ½ taza de vinagre de manzana.
Preparación
Una vez que tengas los ingredientes, remoja las ramas de perejil en el vinagre de sidra de manzana durante unos 10 o 15 minutos. Pasado este tiempo, ya está listo para utilizar.
Para disfrutar de estas propiedades, basta solo con que extraigas las ramas del perejil y masticarlas durante 3 minutos después de cada comida. De esta manera, mantendrás tu boca con un aliento fresco. Esto lo puedes realizar después de cada cepillado.
Bicarbonato de sodio
Está demostrado científicamente que el bicarbonato ayuda a eliminar las bacterias de la boca. Las cremas dentales contienen elevadas concentraciones de bicarbonato de sodio, con lo que se disminuye de forma eficaz el mal aliento.
Con este compuesto se puede preparar un enjuague bucal muy efectivo para limpiar y refrescar la boca. Necesitarás:
- 2 cucharaditas de bicarbonato de sodio.
- 1 taza de agua tibia.
Preparación
Mezcla los ingredientes y mantenlo por 30 segundos en la boca antes de expulsarlo. Con esto, controlarás las bacterias causantes del mal aliento.
Yogur
Es utilizado por su alto contenido en bacterias saludables que se conocen como Lactobacillus, las cuales se encargan de combatir las bacterias malas que se encuentran en diferentes partes del cuerpo, incluyendo los intestinos.
Asimismo, el yogur puede ayudar a disminuir el mal aliento. Para lograrlo, debes comer por lo menos una porción diaria al natural y sin grasa. Por si fuera poco, comer yogur es muy eficaz para prevenir caries.
Semillas de hinojo o anís
Estas semillas han sido utilizadas desde la antigüedad para refrescar el aliento. En la India se usan para limpiar el aliento después de la cena o como refrescante bucal. Su sabor es dulce y contienen aceites esenciales aromáticos que dan al aliento un aroma fresco.
Para preparar esta infusión vas a necesitar:
- 1 cucharadita se semillas de hinojo o anís.
- 1 taza de agua hervida.
Preparación
Incorpora las semillas en una taza de agua hirviendo y tapa la bebida, déjala reposar durante unos 15 minutos y pásalo por un colador. Pasado este tiempo, ya estará listo, puedes tomar hasta 3 tazas de esta infusión diariamente.
Estas semillas pueden comerse solas, tostadas o recubiertas de azúcar. Si las consumes a diario, obtendrás excelentes resultados.
Vinagre de manzana
El vinagre de manzana es empleado por sus propiedades antisépticas, contiene un ácido natural llamado ácido acético que impide que las bacterias crezcan debido a que no les agrada desarrollarse en un medio ácido. Por ello, la elaboración de un enjuague bucal con vinagre puede reducir el crecimiento de bacterias.
Para preparar un enjuague bucal con vinagre, vas a necesitar:
- 2 cucharadas de vinagre de sidra de manzana.
- 1 taza de agua.
Preparación
Mezcla el vinagre con el agua y realiza gárgaras durante 30 segundos antes de desecharlo de la boca. Verás en poco tiempo cómo tu aliento estará más fresco y sin mal olor. Lo puedes usar después de cepillarte los dientes hasta que desaparezca la halitosis.
Té verde
Esta bebida tiene efecto relajante, además de otras propiedades como desodorante y desintoxicante, y es utilizado para limpiar y eliminar bacterias de la boca.
El té verde lo puedes preparar de la siguiente manera:
- 1 taza de agua caliente.
- 1 bolista de té verde.
Preparación
Coloca la bolsita de té verde en la taza de agua caliente, déjalo reposar por unos minutos y tómalo a sorbos lentamente durante todo el día. Con ello, mantendrás un aliento limpio y fresco.
Si lo tomas diariamente, las bacterias que causan mal aliento en tu boca se reducirán con el paso del tiempo.
Menta
La menta es una planta medicinal que posee propiedades digestivas y, gracias a su efecto refrescante, neutraliza el mal olor de la boca. Asimismo, mejora el pH de la saliva. Para realizar la infusión de menta requerirás de:
- 1 cucharadita de hojas de menta.
- 1 taza de agua hirviendo.
Preparación
Para obtener la infusión debes añadir a la taza de agua hirviendo la cucharadita de hojas de menta. Tápala para que pueda reposar durante 10 minutos, luego, cuélala.
Puedes tomar esta infusión de 2 a 3 tazas al día hasta que desaparezca la halitosis.
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- Bravo, J. C., & Bahamonde, H. (2014). Halitosis: Fisiología y enfrentamiento. Revista de otorrinolaringología y cirugía de cabeza y cuello, 74(3), 275-282.
- Fernández Amézaga, J., & Rosanes González, R. (2002). Halitosis: diagnóstico y tratamiento en Atención Primaria. Medifam, 12(1), 46-57.