Alcohol Isopropílico, Usos y Beneficios

Los usos del 2-propanol son bastante amplios, pero a continuación mencionaremos los más comunes:

Uso en la medicina

Se requiere como antiséptico de limpieza y desinfección de heridas de zonas corporales no extensas. Así como de espacios quirúrgicos y materiales médicos. Sus primeros usos incluyeron usarlo como anestésico general en mamíferos pequeños. No obstante, tras la muerte de varios animales por insuficiencia respiratoria y hemorragias internas, se suspendió la práctica.

En el hogar

Es ideal para eliminar y desengrasar zonas del baño y la cocina. Limpia ventanas, espejos y actúa eficazmente en manchas difíciles. Muchas madres de familia utilizan este alcohol para erradicar chinches de colchones y almohadas, pues estos organismos no toleran el ambiente ácido. Lo que hacen en colocar el producto en un atomizador y rociar las partes de la cama sin excederse. Se recomienda realizarlo cada semana y ventilar el colchón antes de acostarse sobre él.

En la tecnología

Por si fuera poco, su efectividad es llevada a la tecnología, pues ingenieros químicos recomiendan esta sustancia para limpiar sin daño alguno pantallas táctiles, ya que se evapora velozmente y se eliminan bacterias y grasas. Cabe mencionar que esto debe aplicarse de manera poco frecuente y en pequeñas cantidades, pues de lo contrario, podría desgastarse la superficie. Su uso también es común en limpieza de discos de vinilo, planchas de cabello y otros aparatos de uso común con suciedad acumulada. Se necesita dejar secar los objetos antes de utilizarlos nuevamente.

Uso Industrial

Es usado como desengrasaste y agente de limpieza a nivel doméstico e industrial. Disuelve pinturas, barnices y tintas. Con relación a la industria química, es ideal para la elaboración de acetonas, ésteres, haluros y éteres. Es un componente de anticongelantes, aceites y tintas de secado rápido. En el mundo de la mecánica se usa para eliminar trazas en los líquidos de freno de los sistemas de frenado hidráulico para un funcionamiento de frenos eficiente. En la década de los 90’s se usaron 45 mil toneladas métricas de alcohol isopropílico tan solo en los Estados Unidos, destinados principalmente como disolventes para revestimientos o para procesos industriales. A diferencia, 5.4 mil toneladas fueron destinadas al uso doméstico y productos de cuidado personal.

Uso sobre el cuerpo

Unas gotitas de alcohol isoproílico puro dentro de los oídos hará que se limpien para poder escuchar mejor en caso de sentirlos tapados o de tener problemas auditivos repentinos. Tal remedio es realizado por nadadores para evitar la otitis externa (una infección del canal auditivo externo), pues no es peligroso por la escasa cantidad utilizada y además, la sustancia se evapora rápidamente.

El uso de este alcohol debe realizarse adecuadamente. En los ojos puede generar irritación y daños en la córnea. En la piel, produce irritación, resequedad, agrietamiento, erupciones y enrojecimiento ante una fricción constante. En el sistema respiratorio provoca irritación en la nariz y garganta.

Olerlo varias horas podría producir somnolencia y confusión, además de náuseas, pérdida de coordinación, dolor de cabeza y/o migraña. En áreas no ventiladas, la persona presentaría pérdida de conocimiento y muerte en casos extremos.

Con relación al sistema gastrointestinal, las grandes cantidades ingeridas pueden ser mortales. En caso de ingesta leve, se experimenta sensación de quemadura interna, calambres estomacales, mucho dolor, diarreas y vómitos frecuentes. El vapor de este alcohol es más denso que el aire y muy flamable, con un rango de inflamabilidad entre 2 y 12.7 por ciento en el aire. El producto debe mantenerse lejos de fuentes de calor o rayos solares.

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